El hallazgo, en medio de un bosque de montaña, de los restos descarnados de un brazo humano y la extraña desaparición de varios vecinos han sembrado la inquietud en la cercana población de Cangas del Narcea. La versión oficial se escuda en abandonos voluntarios de hogares conflictivos o en la huida de realidades desagradables, pero la gente sabe la verdad: la montaña los devora, pues, de cuando en cuando, exige la ofrenda de ese pequeño sacrificio.
La desaparición de Tiago y de su amigo Romeo, jugadores en red de un oscuro juego de rol, desencadena una investigación para la que es solicitada la colaboración de Emilio Menéndez, un eficiente, pero conflictivo, inspector de policía. Su intervención abrirá la Caja de Pandora para así ir desvelando operaciones de narcotráfico y una interminable serie de circunstancias y ritos ancestrales ocultos, hasta entonces, para casi todos.